Hoy los voluntarios educa, bajo la supervisión de profesionales por supuesto, nos dedicamos a desmontar las litografías de Chagall que se exhibieron en el MIN.
Comenzamos a las 10 de la mañana una jornada de trabajo arduo y pesado: primero se bajaban los cuadros (que son pesados por cierto) de la pared, se llevaban al elevador, y luego se transportaban a una sala donde alguna vez se hizo una muestra muy mala de Emmanuele Viscuso. (Fue tan mala la exposición que condenó a la sala a ser utilizada ahora como una bodega :P ) Los cuadros se apoyaban en la pared, en lo que debió haber sido un orden por número de obra, pero que no sabíamos que existía.
Luego se envolvían con una tela que se fijaba con cinta adhesiva.
Se apilaban en orden y luego se colocaban en sus respectivas cajas, que están forradas por dentro con esponja.
Las cajas se cierran y se atornillan.
Desde luego teníamos nuestros momentos de relajación:
Estuvo tan divertido que ni me acordé que era un domingo de trabajo :)
Hoy no desembalamos los grabados de Picasso porque al tratarse de trabajos tan importantes requieren de cuidados especiales que hubieran llevado más tiempo del que teníamos disponible para este día. Dentro de las cajas con las obras hay hasta un manual que explica el estado de cada una de las piezas y sus componentes (marco, vidrio, imagen), y hay que llenar un formulario a medida que se van sacando los cuadros para comparar el estado en el que se enviaron con respecto al de llegada. En fin, cualquier excusa es buena para ir a celebrar el trabajo bien hecho, como hicimos nosotros después. 
Post a Comment