Es un hecho irrefutable que la verdadera esencia del ser humano puede ser vislumbrada únicamente cuando se encuentra en estado de turista.
La maravilla de no tener un horario, y de estar extraviado en tierras foráneas. Hasta la arquitectura se disfruta mejor. Se es incapaz de crear lazos duraderos con las personas que uno encuentra (y las que vienen de tu lugar natal cobran un nuevo sentido), por ende la timidez se disipa. Los parientes ya no son una carga: representan un respiro de familiaridad en medio de todo lo exótico.
La comida tiene una nueva dimensión también, no sólo por la novedad, también porque no hay dieta o sentido común que valga. Volvemos de nuevo a la teoría de que todo sabe mejor cuando se está descalzo; de cómo que cada plato refleja la idiosincrasia de su ciudad.
Se evita pensar en que dentro de poco hay que regresar al mundo real, es decir, se vive en el presente.
Sin embargo, hay ciertas cosas que son iguales en todas partes: cualquier tienda que tenga música cristiana de fondo sencillamente está espantando a los clientes.
No hay forma de cocinar mal el pollo.
No es recomendable comer palomitas con extra queso y zambos salsa verde antes de un trayecto en bus de cuatro horas.
Te gustó San Pedro? no tomaste fotos?
ReplyDeleteNo hay forma de cocinar mal el pollo? Hoy comí un pollo que estaba un poco rosado, tal vez no debí comerlo...
Yo tambien anduve en San Pedro el sábado, fue un viaje rapido, de regreso el mismo dia, fue mas tiempo en la carretera de lo que estuve en San Pedro.
ReplyDeleteSan Pedro me fascina, he ido varias veces y siempre tengo buenos recuerdos. Esta vez no tomé fotos por que sólo andaba con mi mamá y nada más anduvimos en el mall, pero espero ir algún día con tiempo y te aviso para pasar saludándote Bessy.
ReplyDeleteEl pollo rosado es bastante malo...
ReplyDeleteSPS... estuve mucho tiempo allá: mucho calor; demasiado para lo que podía aguantar. Terminaba bañándome como 4 veces al día.
Sí sí sí, debés hacerlo Marcela, y visitar otros lugares que no sea ese mall.
ReplyDeleteEl pollo crudo sí que es realmente malo pero parece que mi estómago ya está acostumbrado a cosas malísimas