El 21 será un número impar, pero hoy es mi favorito.
Dejando de lado las cosas obvias que significa y que mucha gente me ha recordado en estos días (que ya me puedo casar, que ya me pueden correr de la casa, que puedo ir a la cárcel, que al fin puedo salir del país sin permiso paterno), quiero concentrarme en que hay un 1 en mi edad y por ende tiene que traer comienzos. Hoy es el primer cumpleaños en 11 años que voy a tener reunión en mi casa. La primera vez, invité a mis amigas a bailar en la terraza y llamamos a los chavos de la clase para que llegaran. Nos sentíamos tan adultas, wow. (Y la ropa era desastroza, excelente material vergonzoso para mi biografía en A&E.)
Hoy también es el primer día que voy a ir a la universidad en esta fecha. Siempre me salvaba, pero como esta vez cambiaron el periodo vacacional a la mitad del año, no hay remedio. Mientras no haya un montón de post-its con mensajes cursis a lo largo de la escalera que llega a la facultad, con un gran póster meloso en la entrada –basado en una historia de la vida real-, no hay problema.
Qué lástima que sea martes. No es muy representativo de la mayoría de edad que la mejor celebración posible en la ciudad sea una entrada a mitad de precio en el cine. Pero aunque no pase nada interesante este día, es imposible que no lo disfrute.
Dejando de lado las cosas obvias que significa y que mucha gente me ha recordado en estos días (que ya me puedo casar, que ya me pueden correr de la casa, que puedo ir a la cárcel, que al fin puedo salir del país sin permiso paterno), quiero concentrarme en que hay un 1 en mi edad y por ende tiene que traer comienzos. Hoy es el primer cumpleaños en 11 años que voy a tener reunión en mi casa. La primera vez, invité a mis amigas a bailar en la terraza y llamamos a los chavos de la clase para que llegaran. Nos sentíamos tan adultas, wow. (Y la ropa era desastroza, excelente material vergonzoso para mi biografía en A&E.)
Hoy también es el primer día que voy a ir a la universidad en esta fecha. Siempre me salvaba, pero como esta vez cambiaron el periodo vacacional a la mitad del año, no hay remedio. Mientras no haya un montón de post-its con mensajes cursis a lo largo de la escalera que llega a la facultad, con un gran póster meloso en la entrada –basado en una historia de la vida real-, no hay problema.
Qué lástima que sea martes. No es muy representativo de la mayoría de edad que la mejor celebración posible en la ciudad sea una entrada a mitad de precio en el cine. Pero aunque no pase nada interesante este día, es imposible que no lo disfrute.
Felicidades niña. Claro, claro, a la orden. Vamos, so far, the day's been good, right?
ReplyDeleteMe contas como te va con el sushi.
ReplyDeleteHappy bday otra vez.
Feliz cumpleaños Marce! Lástima que no pude asistir a tu fiesta, me habría gustado mucho... Pero esos niños me chupan hasta el último hueso. jajajaja En todo caso, espero que la hayás pasado de lo mejor... :p
ReplyDeleteHey, ¿Qué es eso del Sushi?
Feliz cumpleaños entonces!!
ReplyDeletedesde el fin del mundo.
Saludos
Marce, estoy en tu casa, en tu computadora, en tu fiesta de cumpleaños, escribiendo en tu blog, qué invanción!
ReplyDeleteDebés sentirte afortunada, sos muy especial, te queremos mucho.
Jose casi me muero con el sushi! No, son bromas, fuimos con Yanis al sushi bar y pedimos la orden para dos personas. Vienen 42 rollos, un montón. Por un segundo sentí el impacto del marisco que me iba a hacer sucumbir, pero después me acostumbré. Qué rico. Cuando vengás tenemos que ir.
ReplyDeletePues dejenme sumarme a la fiesta, desde lejos y atrasado, pero igual... Feliz Cumpleaños desde Chile !
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