Tengo semanas de querer hacer una reseña formal de los finales de temporada de The City y Nip/Tuck, pero es apropiado que me haya tardado tanto en darme ánimos para escribir sobre tan tediosos episodios que pulularon sin pena ni gloria y sin que nadie se haya inmutado siquiera ante su partida. Empecemos por Nip/Tuck: esos últimos 7 episodios de esta quinta temporada se sintieron como una larga disculpa por el sobre dramatismo de los primeros 15 debido a aquel horrible personaje que se hacía pasar por una agente y mataba tipos para rellenarlos como peluches de felpa. Creo que todo mundo respiró de alivio cuando Sean la acuchilló salvajemente, una catarsis necesaria para las nuevas historias un poquito más calmadas pero siempre inmorales. Sean se hace pasar por una persona con discapacidad para obtener la simpatía de su familia y de sus alumnas de la universidad, y en un giro que no puedo creer que no se me haya ocurrido antes, a Christian le da cáncer de seno. Suena absurdo, pero a medida que va progresando la temporada uno realmente empieza a temer que Ryan Murphy finalmente haya perdido la razón y pueda realmente matar a uno de sus personajes principales. Christian es diagnosticado en fase terminal y le quedan 6 meses de vida. Ya no tiene nada que perder: trata de dejar sus asuntos en orden y pasar el tiempo que le queda con una mujer que quiere pero no le atrae, sólo porque sabe que será una buena madre para el hijo que va a dejar huérfano. Se casa con ella y cuando uno cree que la temporada va a terminar en una nota optimista sobre el futuro, se nos recuerda que existe una gran diferencia entre vivir como si fuera el último día de nuestra existencia porque tenemos certeza que no queda mucho tiempo o entre vivir normalmente: el doctor se equivocó, Christian no va a morir. Pero eso significa que no puede quedarse casado con Lizzie porque conociéndolo no va a tolerar vivir amarrado y menos con una mujer que no podría aparecer en ninguna portada de revista, y si la vuelve a tratar mal probablemente muera de todas formas bajo los efectos de la ira de una mujer que ya ha maltratado lo suficiente. Es un cliffhanger poderoso, pero modesto, sin sangre, disparos o revelaciones de transexualidad. Nos estamos haciendo muy viejos para esto.


Y bueno, ahora que The Hills se va a convertir en The Heidi and Spencer show ya que Lauren ya se salió y Audrina va a hacer otro programa con el gurú Mark Burnett, probablemente sea hora de volver a leer por las noches. ¿Estaré madurando o será esta una mala etapa para la televisión? Sólo nos queda rogar porque mayo traiga buenos resultados para American Idol.
Es una malísima etapa de la televisión ¬¬
ReplyDeleteYo estoy casi desesperada por lo de DH :(
No veré el show de ese hombre feo con su esposa tonta (...) Difícil de creer, pero extrañaré The Hills u.u