“Jamie Oliver ha tenido que pasar por esto” fue lo que le dije a Esther para convencerla de que me dejara documentar su receta original de piña con verduras que es absolutamente deliciosa, pero que mi síndrome de déficit de atención nunca me ha permitido recordar.
Estas son las instrucciones: sofreír ajo con cebolla (el ingrediente indispensable en esta casa es el ajo y esa es la razón por la que no se ven muchos pretendientes por estos rumbos). 
Agregar chile verde, preferiblemente de diferentes colores. Somos nenas después de todo.
Desde luego, sal al gusto. 
Piña enlatada (hay que ver las piñas en los supermercados aquí, dan lástima!!! Y ni hablar de los mangos, los pobres no saben de lo que se pierden).
Agregar “crema ligera” es lo equivalente a mantequilla crema, pero también se puede usar leche de coco, con las excesivas calorías que eso implica…
Salsa soya, en este ejemplo usando la versión ultra barata de Auchan, que no es tan buena pero como nos da pereza ir al mercado a comprar original es la única que tenemos:
Un poco de harina para espesar la salsa. Tenemos maicena pero igual la usamos porque es harina “anti-grumos”:
Curry para el color, paprika para el picante, pimienta para el sabor:
Y como toque especial: semillas de marañón:
El público espera ansioso la cena: 
Y he aquí el resultado final, a combinar con trigo, arroz, couscous, boulgour o cualquier acompañamiento de su gusto:
Es todo un manjar:
Que rica comida!
ReplyDeleteAtencion: la paprika es mas por color qur por picante (pruebala y nos cuentas)
Cualquier plato que lleve piña y semillas de marañón, está destinado a ser un éxito.
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