15 August 2006

“You cannot go out there with your fight face on!”

Hay un encuentro de facultades de arquitectura en Guatemala, en los primeros días de septiembre. Es bastante barato, considerando la cantidad de días que estaríamos allá, así que yo he estado emocionada al respecto, en teoría. El lunes tuve que enfrentarme a la realidad de que voy con mis compañeros de facultad, los que apenas soy capaz de digerir, y estoy segura que el sentimiento es mutuo. Adiós entusiasmo.

No podría encontrar el punto exacto en la Historia en que empezamos a tener conflicto. Generalmente son todos chavos de generaciones más antiguas, que tienen un grupo muy unido. Con algunos de ellos he llevado clases, y son los que por lo menos mantengo un trato cordial, pero a los otros ni los paso. Eso no es bueno. Vengo de una familia de autoexcluidos, con delirios de grandeza y superioridad, así que reconozco a la gente así rápidamente, y tengo que estar alerta de no caer en mi propia trampa. Llevo lo antisocial en la sangre, así que tengo de qué preocuparme.

Detesto sentir que cada ínfima cosa que haga ahorita va a tener una repercusión para el resto de mi vida. Odio el sencillo panorama de que soy responsable por ese “resto de la vida”. Estoy tratando de entender si el hecho de no llevarme con estas personas me afecta por que es una situación incomoda en el presente, o por las repercusiones que eso podría traerme en el futuro.

Después de mucho pensarlo y de relegarle a Deysi mi decisión de si ir o no, ella accedió, así que del 5 hasta el 10 de septiembre voy a estar fuera. Debería de estar feliz, encantada de volver a ese país que me gustó tanto cuando lo conocí hace más de 10 años, pero en vez de eso estoy haciendo un recuento de todas las series que me voy a perder en ese lapso de tiempo, me estoy mortificando por lo que voy a usar en una fiesta de gala el último día del congreso, y no quiero volver a clases o ver a mis compañeros. Quisiera ser Terencio, el ratón blanco que hoy compró Yanis. Su jaula tiene una casita donde puede esconderse y rehusarse a salir.

3 comments

  1. ¡¡Animo Marcela!!!Piensa en lo que puedes ganar en conocimiento en el congreso..un abrazo:)

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  2. Claro, el congreso rlz! Además, recordá que no tenés por qué tratarlos; ellos se pierden el llevarse con alguien tan increíble como vos. Para mí mejor: menos gente con quien compartirte :P, porque ya vi yo lo fácil que sos cambiándome, sólo bastó que Terencio se moviera en la caja y yo dejé de existir, hahahahahaha claro que estoy bromeando. Por cierto, Terencio manda saludos; el muy condenado esta en huelga de agua: se rehusa a tomar del bebedero pero le fascina la comida que le pongo.

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  3. Jajajaja que linda Marce.
    Deja de pensar en tus shows, en el hotel bien hay cable fijo.

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